Ante todo, es una expresión pública que busca movilizar a la ciudadanía para que
marche por los que aún no pueden marchar en defensa de su derecho fundamental a la vida.
Para que eleven su voz y defiendan los derechos de los que aún no pueden hablar o levantar sus manos
Para que se denuncie que el aborto es un grave crimen que no solo mata al bebe por nacer, sino que también mata psicológica, espiritual y a veces físicamente a la madre y a toda la sociedad le priva de nuevos miembros que le aseguren una existencia futura
También para denunciar el abuso de poder y la violación de la corte constitucional contra la constitución que juro defender pues al despenalizar el aborto atento contra el artículo 11 de la carta que es muy clara al señalar: “La VIDA HUMANA es inviolable, no habrá pena de muerte”
Bajo la argucia de que existen dos derechos en conflicto el del niño por nacer y el de la mujer gestante (aquí no le llaman madre) deciden que son superiores los derechos de la mujer gestante a los del niño por nacer y entonces se puede matar a este por el aborto.
Es importante entender que se despenalizo el aborto, es decir sigue siendo un crimen pero no se castiga en ciertos casos y condiciones. Esto es totalmente diferente a lo que dicen los abortistas y el ministro de Salud Gaviria que proclaman al aborto como un derecho
Están pues manipulando la sentencia de la corte e imponiendo una mentira a fuerza de repetirla y esto debe saberlo la nación.
En esta ocasión marcharemos también para denunciar que el Ministro de Salud Gaviria ha eliminado del plan obligatorio de salud 10 medicamentos esenciales para resolver problemas de salud en la madre gestante para imponer como medicamento esencial la mifepristona que es una droga abortiva, increíble decisión que busca dejar al aborto como única opción ante un embarazo difícil. Todo esto en medio de una caída de la natalidad por debajo de los niveles de reposición que está sumiendo a Colombia en el llamado invierno demográfico, parece que el objetivo es que haya menos cunas y más ataúdes.
Por otro lado, está en trámite la ley 56 de 2016 que busca legalizar el alquiler de úteros, y el mercado libre de embriones, gametos humanos (óvulos y espermatozoides) y su comercialización. Es tan grave la situación que durante el último debate el Senador Liberal Horacio Serpa se ha mostrado muy preocupado y ha manifestado que le parece que los niños con esta ley quedarían reducidos a ser unas mascotitas para complacer el capricho de algunos, y el no es propiamente un próvida sino todo lo contrario
Queremos denunciar esta ley y tumbar su trámite para evitar una desgracia más a la nación.
Marcharemos también para denunciar el constante esfuerzo para imponer la eutanasia, aplicándola a aquellos que ya no son “útiles” , es decir a los enfermos graves, a los ancianos o personas con enfermedades difíciles, bajo el pretexto de que esto sería un acto de ternura y no como lo es en realidad, un asesinato de las personas que más requieren nuestra ayuda y solidaridad