Los diputados británicos rechazaron este lunes una enmienda destinada a prohibir explícitamente el aborto motivado por el sexo del bebé.

Esta enmienda reflejaba la preocupación de que en algunas comunidades extranjeras en Gran Bretaña se pueda recurrir al aborto selectivo, como se hace en China y en India.

La ministra de Salud Jane Ellison se opuso a esta enmienda al declarar que el aborto selectivo en función del sexo “ya es ilegal”.

Sin embargo, varios diputados han defendido la necesidad de una medida de este tipo porque la ley no menciona específicamente esta práctica.

“Esta enmienda es necesaria ya que no hay un párrafo explícito en la ley británica sobre el aborto selectivo dependiendo del sexo”, aseguró la diputada Fiona Bruce promotora del proyecto. En 1967, cuando la ley sobre el aborto fue adoptada la tecnología no permitía determinar el sexo del feto, justificó.

Los diputados que se oponían a la enmienda, que rechazada por 292 votos contra 201, alegaban que una prohibición explícita de esta práctica sería inaplicable y tendría consecuencias inesperadas al complicar en particular el acceso de las mujeres al aborto.

El plazo legal para abortar en Gran Bretaña es de 24 semanas.