La MCI afirmó que es inquietante para el país que se adopte una posición injusta contra el funcionario y se decida retirar el cargo al único magistrado de tendencia conservadora que queda en el alto tribunal, el cual ha adoptado posiciones contrarias a la mayoría en temas como el aborto, el matrimonio y adopción homosexual y la imposición de la ideología de género.

“Solicitamos que se respeten en el proceso del magistrado Jorge Pretelt la división de poderes y las garantías constitucionales, así como su legítima defensa y que no se adopte una decisión por meros prejuicios ideológicos que hagan parte de una campaña metódica para sacar de las altas cortes a los pocos magistrados que defienden los valores esenciales de nuestra sociedad y los principios que la Carta Magna ha establecido en nuestro país”, señala la misiva.

De igual forma afirman que “nos preocupa la posición misma de la Corte, que pasando por encima del Congreso de la República ha asumido una labor legislativa, extralimitándose en sus funciones, fijando posturas radicales frente a temas sensibles para la ciudadanía”.

La iglesia cristiana afirmó que en los últimos años las decisiones judiciales de nuestro país han estado profundamente influenciadas por ideas contrarias a los valores de la familia, la vida y el respeto por la libertad religiosa.