El “lobby gay” emprendió una verdadera “cacería” contra el obispo de Aguascalientes, Mons. José María de la Torre, a quien denunciaron ante el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED) y no descartan una denuncia penal.
La queja viene a cuento de las declaraciones del obispo en que muestra su oposición al matrimonio entre personas del mismo sexo y pide a los diputados y gobierno que centren sus prioridades en la lucha contra la pobreza, la exclusión social y la desigualdad de oportunidades. Además, lanzó el siguiente reto:
“No entiendo qué entienden ellos por familia. Platiquemos en su casa con su familia y sus hijos qué entienden ellos por familia (…) Con una mano siembran y con otra aplastan lo sembrado”.
¿Por qué tanta polémica?, ¿por hablar con propiedad?
Por lo demás, la posición de Mons. de la Torre nunca ha sido despectiva, insultante o personal. Una cosa es querer y amar a los homosexuales, y otra aprobar sus actos y la intención del homosexualismo político de dinamitar la estructura familiar, célula básica de toda sociedad.
Lo que está de fondo es un intento de acallar la voz de la Iglesia, de impedir que la Iglesia pueda predicar su doctrina sobre la familia. Una verdadera “inquisición rosa”. Un atentado a la libertad de expresión y también a la libertad religiosa.
Si quieres mostrar tu apoyo personal al obispo de Aguascalientes y defender la libertad religiosa y de expresión, puedes hacerlo aquí:
http://www.citizengo.org/es/11689-apoyo-y-solidaridad-con-obispo-aguascalientes
http://www.yoinfluyo.com/mundo/109-vida-y-familia/9537-inquisicion-rosa-quiere-acallar-la-voz-de-la-iglesia